La revolución Textil
Martes 12 de diciembre 2017 a las 11:30h
La Revolución Textil
La historia de la manufactura textil es muy antigua. Desde siempre homo sapiens empezó a «vestirse», bien por razones del frío, por pudor o por mostrar su supremacía social.
La industria textil es el sector industrial de la economía dedicado a la producción de fibras —fibra natural y sintética—, hilados, telas y productos relacionados con la confección de ropa. Hilar es retorcer varias fibras cortas a la vez para unirlas y producir una hebra continua; cuando se hilan (retuercen) filamentos largos, se obtienen hilos más resistentes. Un tejido es el género obtenido en forma de lámina más o menos resistente, elástica y flexible, mediante el cruzamiento y enlace de series de hilos o fibras de manera coherente al entrelazarlos o al unirlos por otros medios.
En el neolítico se comenzó a hilar el lino para el verano, y la lana para el invierno; el huso y el telar son inventos del neolítico. No hay pruebas de la manufactura del tejido en el paleolítico, apenas de hilos unidos formando cuerdas. En ocasiones se vestían con cuerdas, que, las colocaban alrededor del torso, las más veces a modo de faldillas.
En las sociedades primitivas que desconocen el tejido o éste se emplea poco, predomina el desnudo sobre el vestido. Pero no carecen de pudor, aunque lo localicen en zonas corporales poco extensas comparadas con las que concitan nuestro pudor occidental.
Estos ocasionales tejidos se elaboraban con fibras vegetales: lino y cáñamo en Eurasia; algodón en La India y algodón y yuca en América.
Se llama tejido a una estructura resultante del entrelazado de hilos.
La rueca aparece por primera vez en el año 3.000 a. C., aproximadamente.
Hasta el nacimiento de la industria textil, los tejidos y el hilado en general, se realizaba en los hogares, en la mayor parte de los casos para consumo propio.
Entre finales del siglo XVII y principios del XVIII el gobierno británico aprobó una serie de leyes con el fin de proteger a la industria de la lana británica, de la creciente cantidad de tela de algodón que se importaba desde India Oriental.
El primer torno de hilar mecánico, conocido como Hiladora Jenny, tenía ocho husos. Las siguientes versiones tenían dieciséis husos, y más tarde ciento veinte, todos accionados con la misma rueda.
En el año 1764 un solo hilador gracias a la maquina «spinning Jenny» podía dar trabajo a 8 tejedores.
En 1785 solamente un hilador y un tejedor, al frente de un telar mecánico, accionado por vapor, multiplicaba por 70 la producción del año 1700.
Como siempre, el gran freno al desarrollo industrial, estaba en la fuerza motriz capaz de mover las máquinas. Existía la posibilidad de utilizar, para dicho fin, la energía hidráulica, algo que hicieron muchas nuevas industrias textiles. Sin embargo, la aplicación de la máquina de vapor supuso un corte radical con todo sistema empleado hasta entonces.
El ludismo fue un movimiento encabezado por artesanos ingleses en el siglo XIX, que protestaron entre los años 1811 y 1816 contra las nuevas máquinas que destruían el empleo. Los telares industriales, la máquina de hilar industrial y el telar industrial introducidos durante la Revolución Industrial amenazaban con reemplazar a los artesanos, con trabajadores menos cualificados y que cobraban salarios más bajos, dejándoles sin trabajo.
En España, a la altura de 1830 se utiliza la primera máquina de vapor en la industria textil catalana y a partir de 1850 comienza a generalizarse la mecanización en el trabajo de la lana gracias igualmente al vapor.
Cuando, a finales del siglo XIX, algunos países europeos iniciaban la Segunda Revolución industrial, nuestro país seguía siendo eminentemente agrario. El mercado español tenía poca capacidad de compra para importar algodón y carbón, pero, a pesar de esto, en Cataluña, se creó una importante industria textil, sobre todo algodonera, gracias al avance de la economía catalana y al proteccionismo aplicado por casi todos los gobiernos liberales. Podéis ampliar la información en La Revoluciíon Textil.
Fecha: Martes 12 de Diciembre de 2017
Hora: 11,30 horas. Se ruega puntualidad
Lugar: Biblioteca Municipal (Plaza de España nº 7) de El Escorial.
Podeis venir con vuestros amigos.