La medición de la longitud marina y su influencia en la carrera de indias
Sede de encuentros (12)
Calle del Rey 36, 1ª `planta
La idea central de esta charla es la de explicar los retos que tuvieron que afrontar los descubridores, navegantes y mercaderes como consecuencia del desconocimiento de los mares y la necesidad de navegar sin mapas marinos. La primera deficiencia de que partían era la de conocer el diámetro real de la tierra; aunque podían localizar aproximadamente el paralelo sobre el que se encontraban guiados por las estrellas, la luna y el sol ignoraban la longitud sobre dicho círculo, ya que la tierra estaba girando alrededor del sol permanentemente y no disponían de referencia fija con la que situarse.
Vídeo de la conferencia
Desde la salida de Colón en 1492 los navegantes se aventuraron en mares abiertos sin poder divisar la costa que les guiase como referencia. Colón pretendía llegar a Cipango (hoy Japón) según sus cálculos para poder alcanzar la Indias orientales navegando hacia occidente. Este propósito imaginado por él pretendía llegar al país de la seda y obtener beneficios por el mercado de la misma sin atravesar la ruta terrestre. Los errores que cometió fueron palpables, hoy conocidos pero ignorados en aquel año. Igual que Colón, los errores cometidos por Magallanes para llegar a las islas Molucas, proveedoras de las especies de rentabilidad tan conocida, tuvieron las mismas consecuencias dramáticas para él y su tripulación. La causa seguía siendo la misma: no disponían de instrumentos para medir la longitud marina sobre los paralelos. Hasta el siglo XVIII todos los marinos de cualquier procedencia, nacionalidad o bandera sufrieron por la misma causa innumerables accidentes, algunos mortales y cuando menos causantes de la falta de agua y de la enfermedad del escorbuto.
En esta presentación que hoy llevamos a cabo pretendo dejar claro la audacia y el riesgo que demostraron tener los navegantes, mercaderes y financieros hasta que consiguieron descubrir la forma de medir la longitud y poder situarse con claridad sobre cualquier punto del mar.
El diseño de paralelos y meridianos conociendo el giro de la tierra en veinticuatro horas permitió asignar a cada punto terrestre una medida exacta con la longitud y latitud del mismo, trasladándolo a los mapas. Con ello no habría pérdidas, ni catástrofes, ni imprevisiones para la dotación necesaria. Había que conocer el punto de salida y el punto de llegada, lo que permitiría trazar la ruta a seguir sobre el mapa, la duración del recorrido y la comprobación exacta con el cielo, ya que la tierra no se podía ver desde alta mar.
La navegación en Europa se había llevado a cabo mediante la referencia terrestre del Mediterráneo y el Mar del Norte; era la navegación de cabotaje. Hoy el disponer de referencia desde los satélites y la utilización del GPS facilita la localización. El no disponer de instrumentos como los actuales nos obliga a reconocer la audacia y el afán innovador de aquellos hombres que hicieron cambiar la historia de la humanidad.
No quiero extenderme más en esta pequeña presentación para que podamos atender las pequeñas explicaciones de la charla a base de contemplar sobre otros medios actuales lo que no pudieron contar los hombres de entonces sobre sus aventuras y esfuerzos.
CV
Miguel Ángel Ramos Lázaro. Nacido en Salamanca en el año 1942
Titulaciones y ejercicio profesional: Aparejador y Economista.
Mi actividad ha sido totalmente práctica.
Como Aparejador he participado en empresas e instituciones Públicas para la construcción de viviendas, urbanizaciones, hospitales, museos, oficinas, oficinas bancarias y otro tipo de edificaciones. Esta actividad me relacionó durante más de 40 años con el área tecnológica, señalándome la necesidad de aplicar en paralelo las cuestiones técnicas con decisiones económicas, hasta el punto de conocer que no habría ningún tipo de tecnología si no se hacen los cálculos financieros, de costes, valoraciones y precios para llevar a buen fin cualquier proyecto, incluido el que se relacione con la investigación y la innovación.
La experiencia económica, independientemente del señalado arriba, he trabajado en la empresa CAMPSA en diversos departamentos, desde el de Administración, Informática, Presupuestos y Control de Gestión, y como Director de Desarrollo de Recursos Humanos. Participando con este cargo en la creación de Repsol. Una vez cumplido el Plan Estratégico que acababa con CAMPSA, pasé a trabajar en BANESTO como Director de Obras y Mantenimiento. Como consecuencia de la intervención de este Banco me dedique al trabajo por mi cuenta creando una Asesoría Económica, Financiera, Fiscal y Laboral, funcionando durante 25 años hasta mi jubilación.