Queridos amigos

Casi sin darnos cuenta, sin hacer ningún ruido y con una tremenda delicadeza se nos ha marchado para siempre nuestro querido compañero Antonio Ruiz Marcos.

Todos sabéis perfectamente quién era.. pero quizás lo que no tengáis muy claro es…  que nuestro querido Antonio, era un sabio reconocido internacionalmente.

Bien es cierto que en sus últimos años, sus 19 micrometástasis cerebrales le ocasionaban unos ciertos desajustes, tanto en su dicción como  en la exposición de su forma de pensar. Los que estuvimos más próximos a él, nos dimos cuenta de todo ello hace bastante tiempo, pero su situación era ya irreversible.

Antonio empleó toda su vida en la investigación científica, en el estudio básico del cerebro humano, más concretamente en el estudio de las neuronas y sus relaciones entre ellas. Desarrolló su labor investigadora en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas Santiago Ramón y Cajal de Madrid, para ir alcanzando,  posteriormente, puestos superiores en el mismo centro, culminando su carrera científica, como profesor de investigación.

Los que no estáis familiarizados con la investigación científica, no sabéis que ser profesor de investigación, es el nivel más alto que un investigador puede conseguir en toda su carrera profesional, estando equiparado, en categoría, al título de catedrático de universidad.

Antonio desarrolló su trabajo no sólo en España, como profesor de investigación , también fue desplazado, como investigador,  por otros países, donde desarrolló su labor científica, en numerosas ocasiones, no sólo en Europa sino en los centros de investigación más importantes de los Estados Unidos de América. Siempre sus trabajos fueron altamente valorados, ofreciéndole continuamente que se quedara,  en aquellos laboratorios donde desarrollaría su trabajo con muchos más medios que en  España.

Su principal faceta investigadora consistió en saber cuantificar relaciones subjetivas, como las de las  neuronas, que precisaban conjugar una gran cantidad de diferentes variables que sólo la informática podía ofrecer una aproximación razonable.

Cuando en el Ateneo Escurialense nos dio algunas conferencias sobre este tema, siempre nos sorprendió el tamaño de las gigantescas matrices que tenía que utilizar para conseguir encontrar alguna interrelación.

 

 

Como él decía, la neurona es un misterio, inmerso en otro misterio de mayor tamaño.

 

Sin darnos cuenta, hemos tenido sentado en nuestras incómodas sillas del Ateneo Escurialense, a un sabio apreciado por todo el mundo.

El próximo miércoles 22 de Enero, en la Librería Cocheras Coliseo, en la Plaza Jacinto Benavente nº 2, a las 7 de la tarde, el Ateneo Escurialense le ofrecerá un homenaje donde pondremos de manifiesto su figura científica y humana.

Contamos contigo

Luis Ximénez Herráiz
Presidente del Foro de Ciencia y Tecnología del Ateneo Escurialense